Aumentan muertes en Brasil por caso de bebidas alcohólicas adulteradas con metanol
Brasil atraviesa una grave crisis sanitaria por la circulación de bebidas alcohólicas adulteradas con metanol, un compuesto químico extremadamente tóxico. Las autoridades confirmaron dos muertes y mantienen bajo investigación más de 200 casos distribuidos en varios estados del país. La situación encendió alertas en toda la región y reavivó el debate sobre los controles en la producción y venta de alcohol.
El metanol, también conocido como “alcohol de madera”, es utilizado habitualmente en productos industriales, pero nunca debe ser ingerido. Se han reportado casos en los que fue agregado ilegalmente a bebidas como la caipirinha para reducir costos en la elaboración clandestina de licores. Expertos señalan que esta práctica, además de criminal, conlleva un alto riesgo de intoxicación masiva.
Según el toxicólogo Carlos Damin, las primeras señales de intoxicación pueden parecerse a un estado de ebriedad, pero rápidamente evolucionan hacia síntomas graves como visión borrosa, vómitos, dolor de cabeza, pérdida de la visión, coma e incluso la muerte. “Tiene una mortalidad del 40% aún con atención médica”, advirtió Francisco Dadic, también especialista en toxicología.
El metanol no tiene sabor, olor ni color perceptible, por lo que es prácticamente imposible identificarlo sin un análisis de laboratorio. Esto lo convierte en un riesgo oculto presente sobre todo en bebidas de bajo costo o de origen desconocido.
La recomendación principal de las autoridades sanitarias es no consumir alcohol de procedencia dudosa y buscar atención médica urgente ante cualquier síntoma tras beber productos potencialmente adulterados. En Brasil se habilitó una línea gratuita de asistencia toxicológica (0800-722-6001) y se centralizó la atención en 13 centros especializados.
